¿Buscas una forma sencilla de durar más en la cama? Elegir las posturas adecuadas puede ayudarte a mantener el control y disfrutar de encuentros más largos. Aquí te contamos cuáles son las mejores.
¿Por qué cambiar de postura puede ayudar a durar más?
Elegir posturas que disminuyan la fricción o que permitan un ritmo más controlado puede ser una buena estrategia para durar más. Estas posiciones también te dan mayor control sobre el movimiento, lo que facilita detenerse o reducir la intensidad cuando la excitación es alta. Esto permite un mayor tiempo de recuperación y ayuda a evitar el clímax antes de tiempo.
Posición del misionero
La posición del misionero es una de las posturas más comunes, pero adaptarla puede ayudarte a durar más. Mantén el ritmo lento y realiza movimientos controlados. En lugar de penetraciones profundas, opta por movimientos cortos y menos intensos. Teniendo el control, puedes reducir la velocidad cuando sea necesario y evitar una excitación excesiva que conduzca al orgasmo precoz.
La vaquera o «Ella Arriba»
En esta postura, la persona receptiva se sitúa encima, permitiéndote relajarte y tomar el control de la respiración. Esto disminuye la tensión muscular y reduce el nivel de excitación. Además, al no estar en una posición activa, puedes concentrarte en controlar tu respiración y tus movimientos, elementos clave para alargar el encuentro sexual.
La cucharita
La posición de la cucharita es ideal para el control del ritmo, ya que permite movimientos lentos y menos exigentes físicamente. Al estar ambos acostados de lado, se minimiza la presión y la excitación se mantiene en niveles bajos, lo que puede ayudarte a retrasar el clímax. Esta postura también fomenta la intimidad y permite un mayor contacto físico sin que la excitación alcance picos elevados rápidamente.
Doggy style
La postura del perro puede ajustarse para mejorar la duración. Estando detrás, mantén un ritmo pausado y movimientos controlados. Limitando los empujes intensos, puedes moderar tu excitación. Si la posición comienza a aumentar tu excitación, detén los movimientos brevemente y respira profundo, lo cual ayuda a bajar la intensidad.
Técnica de pausas y cambios de ritmo
Aparte de las posturas, hacer pausas y cambiar de ritmo es una técnica que puede ayudarte a durar más en cualquier posición. Si sientes que estás cerca de alcanzar el clímax, detente y toma unos segundos para respirar profundamente. Retoma el movimiento cuando te sientas en control. Esta técnica de pausas es efectiva para retomar el control y prolongar el tiempo del encuentro.
La Importancia de la respiración y el control mental
Además de las posiciones, el control de la respiración y el enfoque mental son fundamentales para durar más. Respira lenta y profundamente para reducir la excitación y mantenerte en control. Concéntrate en disfrutar de la experiencia en lugar de alcanzar el clímax rápidamente. Estos elementos, combinados con posturas adecuadas, pueden hacer una gran diferencia en la duración de tus relaciones.
Eligiendo las posturas adecuadas, controlar el ritmo y la respiración, es posible prolongar el tiempo de las relaciones sexuales y disfrutar de encuentros más duraderos. Practicar estas posiciones y técnicas puede ayudarte a mejorar tu resistencia y disfrutar de una vida sexual más satisfactoria. Prueba y encuentra las que mejor se adapten a tus preferencias y necesidades.